Los antecedentes históricos de la RSE en nuestro país, nos remite a comienzos del siglo pasado, cuando algunas empresas como La Electricidad de Caracas comenzaron a concretar sus primeros aportes en favor de sus trabajadores. Sin embargo, la mayoría de estas obras sociales se efectuaban a título personal, sin otra intención ni vinculación con la organización; eran los años del altruismo y la solidaridad sin estrategias.
Según lo refiere P. Puterman (2005), durante los años 40 y 50, los empresarios venezolanos se vieron en la situación de enfrentar la amenaza del Comunismo y la confrontación política, mediante la figura de la Solidaridad. Fue entonces cuando surgieron una serie de Fundaciones para llevar a cabo en forma más contínua y estructurada esos programas orientados al bien común. Una de esas instituciones fue el Dividendo Voluntario para la Comunidad (DVC).
El DVC es un referente histórico obligado en la historia de la RSE. Fundada en 1964 por Eugenio Mendoza Goiticoa y varios empresarios venezolanos, ha contribuido con creces a mejorar la calidad de vida en sectores de escasos recursos, mediante proyectos específicos y en alianza con comunidades, organizaciones de desarrollo social, autoridades y medio centenar de empresas asociadas.
A lo largo de estos 44 años, su vigencia y ejemplo de organización se manifiestan a través de su constante labor por crear una verdadera cultura empresarial enfocada al servicio de quienes más lo necesitan, los novedosos programas de recaudación de fondos y la promoción y monitoreo de sus proyectos controlando su eficiencia y sustentablidad en el tiempo.
"Construyendo Comunidad" es el proyecto bandera que actualmente desarrolla esta Fundación, diseñado para atender en forma integral las condiciones de un sector determinado, principalmente; servicios públicos, urbanismo, vivienda, salud, educación y organización comunitaria.
Según lo refiere P. Puterman (2005), durante los años 40 y 50, los empresarios venezolanos se vieron en la situación de enfrentar la amenaza del Comunismo y la confrontación política, mediante la figura de la Solidaridad. Fue entonces cuando surgieron una serie de Fundaciones para llevar a cabo en forma más contínua y estructurada esos programas orientados al bien común. Una de esas instituciones fue el Dividendo Voluntario para la Comunidad (DVC).
El DVC es un referente histórico obligado en la historia de la RSE. Fundada en 1964 por Eugenio Mendoza Goiticoa y varios empresarios venezolanos, ha contribuido con creces a mejorar la calidad de vida en sectores de escasos recursos, mediante proyectos específicos y en alianza con comunidades, organizaciones de desarrollo social, autoridades y medio centenar de empresas asociadas.
A lo largo de estos 44 años, su vigencia y ejemplo de organización se manifiestan a través de su constante labor por crear una verdadera cultura empresarial enfocada al servicio de quienes más lo necesitan, los novedosos programas de recaudación de fondos y la promoción y monitoreo de sus proyectos controlando su eficiencia y sustentablidad en el tiempo.
"Construyendo Comunidad" es el proyecto bandera que actualmente desarrolla esta Fundación, diseñado para atender en forma integral las condiciones de un sector determinado, principalmente; servicios públicos, urbanismo, vivienda, salud, educación y organización comunitaria.
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